LA MANA NEGRA HIZO BRILLAR A
LATACUNGA
POR: VERÓNICA
FLORES
El cielo se vistió de celeste y blanco para dar la bienvenida a los
latacungueños que celebraron los 50 años de La Mama Negra de noviembre, y así venerar
un año más a la Virgen de las Mercedes. Propios y extraños fueron llegando al
lugar de la concentración y en zozobra por ver a los personajes más
representativos: la Mama Negra, el Ángel de la Estrella, el Capitán, el
Abanderado y el Rey Moro.
La calle Quito se vestía de cálidos colores, que distinguían a las
diversas comparsas. Se escuchaba tocar una banda, con la tradicional canción
que acompaña este momento, mientras que a lo lejos se observaban los colres
blanco y dorado destacar en medio de tanta gente, era el primer personaje, el Ángel
de la Estrella, que este año lo interpretó Miguel Ángel Rengifo Robayo, periodista
y quien actualmente trabaja como secretario de la Casa de la Cultura
Ecuatoriana (CCE) núcleo de Cotopaxi.
Junto con su corcel blanco y las entidades jochadas recorrerá las calles de
Latacunga, “El Ángel de la Estrella es
el portador de la buena nueva, es el ángel guardián del capitán, es el que de
cierta forma representa la juventud, y en ella se refleja la esperanza”, afirma
Rengifo.
Cuando pasa por el altar de la virgen, su sequito le ayuda a bajarse del
caballo, y en seguida se arrodilla, menciona unas cuantas loas a la Mama Negra,
entre ellas: “Virgen de las Mercedes, tus siervos te vienen a alabar, todos
juntos, con un solo corazón pedimos tu santa e inmaculada bendición para poder
llegar hasta tu hijo bien amado, cumple las intenciones de un pueblo bien
abnegado”. Al finalizar sus palabras, mirando a la virgen y al cielo suelta de
entre sus manos una paloma blanca.
Conforme las comparsas se van acomodando, asoma con sus colores dorado y
negro Germánico Alvear, actual presidente del Centro Agrícola Cantonal de
Latacunga, que representa al Rey Moro. Dice sentirse muy orgulloso y honrado,
menciona: “la comparsa tiene una magia que hace que los pueblos estén unidos”,
además dice: “la Mama Negra de septiembre es eminentemente religiosa, donde se
brinda tributo a la Virgen de las Mercedes, y la de noviembre es un teatro
popular, una parodia que se hace con relación a la de septiembre”. La
preparación para este día la empezó desde las 4h30, se siente ya listo para el
desfile, menciona que alrededor de 11 delegaciones son las que le acompañan en
esta travesía.
A continuación está otro personaje de la Mama Negra, el Abanderado, que
está representado por Cristóbal Javier Estrella Villavicencio, propietario de
Induacero, empresa dedicada a la metalmecánica, menciona que para él la Mamá Negra
es la fiesta folclórica autentica de los latacungueños, además dice que es una
pieza cultural muy reconocida y patrimonio tangible de los ecuatorianos. Con
respecto a su preparación, Estrella menciona: “llevo preparándome desde el 17
de septiembre, día en que me jocharon, y hoy estamos desde las 04h00, todo sea
por nuestra querida tierra”. A este personaje lo acompañan 10 delegaciones. “Un
personaje debería continuar con obras y siendo participativo a nivel político y
empresarial”, dijo. Además menciona que la bandera multicolor que porta refleja
la unión. Su petición para la virgen: “voy a pedir que a los latacungueños nos
siga dando trabajo y bienestar para el país”.
Luis Reinoso, ex Mamá Negra, cuenta que Latacunga pasaba un momento
crucial debido a las constantes erupciones del volcán Cotopaxi, también se
conjugó la liberación de los indígenas y negros, la gente optó por clamar a la Virgen
de la Merced para ser salvados de la tragedia. Pero sin embargo, nadie quería
hacerle frente a la situación, así que de entre la multitud salió una morena a
dar la cara y eligió algunos colaboradores, entre ellos: el ángel de la estrella, el capitán, el abanderado y el rey moro. “Los
latacungueños debemos acoger a la gente que viene de visita”, dijo. Además
acota que se debería realizar recuerdos o postales para que los visitantes
puedan obtenerlos fácilmente.
Guido Yauli Chicaiza, rector en funciones de la Universidad Técnica de Cotopaxi
(UTC), menciona: “como centro de educación superior somos responsables de
rescatar y fortalecer esta festividad, por ello los universitarios festejamos
hoy con alegría”.
Jorge Guamán, prefecto de la provincia, habla de que esta festividad se
la realiza con cariño, además que “los cotopaxenses tienen la cultura viva, por
eso la versión 2014 se la realiza de la mejor manera, con participación, coraje
y baile, existiendo la interculturalidad”. Ya una vez en el altar de la virgen, le pidió la bendición para poder
culminar la fiesta de la Mama Negra versión 2014, además dirigiéndose a los
espectadores menciona: “tenemos una madre que nos protege toda nuestra vida en
la formación, política, producción y educación”. Pidió ayuda para los latacungueños, ecuatorianos y latinoamericanos y la
bendición para poder trabajar.
Lourdes Tibán, asambleísta nacional, también participó del desfile junto
al Prefecto, dice que “este evento ya ha trascendido fuera del país, de manera
que para los cotopaxenses representa una de las fiestas religiosas y culturales
más importantes”. Ante la pregunta de que si era mejor que una mujer sea
elegida Mana Negra, respondió: “el día que una mujer sea la Mama Negra
estaremos doblemente representados, en cuanto a la igualdad de género, porque
no puede ser que un hombre se vista de mujer para representar a este personaje,
en ningún lado y parte está prohibido que una mujer haga este papel, sueño con
que alguna vez los latacungueños rompan ese esquema”.
El último personaje de la fiesta es la Mama Negra, que este año fue
representada por Byron Burbano Moreno, es notario quinto de Latacunga. Su
colorido vestuario y la muñeca que lleva en su mano gusta mucho a los
espectadores. De este modo culminaba la tradicional fiesta latacungueña, La
Mama Negra.
Desde el ojo del turista
Juan Carlos Navarrete, oriundo de Quito, dice que es la segunda vez que
viene a un evento de estos, y comenta que le gusta mucho el ambiente de fiesta,
la gente contenta, “sobre todo el valor y homenaje a la Virgen de las Mercedes,
lo cual tiene su dosis de espiritualidad y mí me parece muy importante”, dijo. A
Juan le gusta mucho la fotografía, por lo que espera tomar las fotografías de
todo el desfile y en especial del personaje central.
En medio del grito de agente que pedía: ¡loa, loa, loa!, está Tamara, de
la Republica Checa, quien menciona que le gusta el ambiente, por la gente
animada: “me siento parte de la fiesta, la gente quiere incorporarse, los
trajes son diversos y colorados, en mi país no hay muchas fiestas tradicionales
y yo aprovecho de esto”.
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