DE PRESIDENTE A BOXEADOR
POR DAVID GUAMÁN
¡El pasado no volverá! se
proclama cada fin de semana por tres horas, es un mensaje sin sentido según
parece; pues, ahora se quiere arreglar los problemas, no con soluciones, lo de
ahora son los golpes o el ‘‘uno a uno’’ como lo dice el presidente. Antes de la
riña, Andrés Páez lanzaba varios golpes bajos a un presidente que no le gusta
admitir la verdad y la culpa, se hablaba del primo y su boda, del préstamo a su
amigo el argentino, títulos plagiados o falsos, helicópteros que caían,
contratos con la familia, sobreprecios en obras estatales, un secuestro
inventado, espionaje y la lista seguía, pero el presidente ya no soportó tanta
calumnia “del
más grande mentiroso del Ecuador”, no pudo mandarlo a juicio porque en
la Fiscalía le decían que se saturó el sistema, no le pudo sacar 40 millones para
invertirlos en tres kilómetros de carretera, la mejor opción era ir a los
golpes, consiguió el auspicio del IESS que prometió atender a quien fuera el
herido antes de los 6 meses, las ambulancias antiguas con precio de nuevas
estaban a disposición, el ibuprofeno estaba listo, Páez aceptó, Simon lo agendó,
Correa dimitió y pidió disculpas.
Al parecer fue un momento
de exaltación, o se dio cuenta que con esto demostraba que estamos volviendo al
pasado al que tanto satanizan, al de los diputados corruptos, a las amenazas y
a los golpes, en donde se manejaba un Estado quebrado, que tuvo que optar por
otra moneda, en aquel tiempo al igual que hoy se decía que nada iba a pasar,
pero pasó. ¿Será una advertencia? ¡Prohibido olvidar!
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