UTC: 21 AÑOS JUNTO AL
PUEBLO
Por: Ximena Garzón/Séptimo D
Somos una universidad de educación superior vinculada con
el pueblo, buscamos unir a las nacionalidades, pueblos y comunidades que son
consideradas parte de la familia utecina, formamos profesionales de calidad y
excelencia y, sobre todo, humanistas, con pensamiento crítico, preparados para
enfrentar cualquier tipo de adversidad que se presente en el ámbito
profesional. Somos un referente regional de formación, investigación y
vinculación social en favor del desarrollo de nuestras comunidades.
Fuimos, somos y seremos un ejemplo de lucha, porque de la
nada surgimos y conseguimos tener en nuestra provincia una institución pública
de educación superior que ayude a los jóvenes con escasos recursos económicos a
instruirse y obtener un título. Esto ha ayudado a formar personas emprendedoras
a nivel local y nacional.
Es así como la Universidad Técnica de Cotopaxi (UTC),
tras un largo camino, logró constituirse como una de las mejores instituciones
de educación superior a nivel regional; poseedora de la mejor infraestructura,
que a pesar de haber sido inicialmente destinada para la construcción de una
cárcel, autoridades y el pueblo de San Felipe lograron conseguir volverla una
universidad, con una identidad institucional, que representa y deja en alto el
nombre de Cotopaxi.
La UTC es una institución que, semestre a semestre, abre
sus puertas a miles de jóvenes soñadores, que buscan ser profesionales en
distintas ramas, humanistas, técnicas y agropecuarias, todas estas ofertadas
dentro de nuestras mallas curriculares.
Son 21 años de formar los mejores profesionales, de
albergar a más de 3.000 estudiantes de diferentes lugares del país, sin
discriminación alguna, basándose en principios de equidad, justicia y libertad,
permitiendo ser parte de una comunidad estudiantil que demuestra ser la mejor
en su rendimiento académico; que desenvuelve sus actividades en la mejor
infraestructura y laboratorios, que son de mucha utilidad para el proceso de
enseñanza-aprendizaje de docentes y estudiantes, aspectos que llevan a nuestra
querida UTC a ser una universidad del pueblo y para el pueblo.
Estudiantes, docentes, personal administrativo, somos un
solo corazón, que ama y respeta a la institución que nos permitió formar parte
de ella, sin importar nuestra clase social o posición económica, lo único que
importa es tener el sueño de ser profesionales, tener un futuro digno que
permita satisfacer las necesidades de nuestras familias. ¿Cómo no formar parte
del alma mater cotopaxense, nuestro segundo hogar?
Estamos viviendo un momento difícil, a causa de la
recategorización, pero lo único que importa es demostrar que la UTC es una de
las mejores instituciones educativas del país, donde miles de utecinos luchamos
por tener una profesión, estudiando con dedicación y con la ayuda de los
mejores docentes que imparten sus conocimientos en las aulas de clase.
Por esta y muchas razones más, todos y cada uno de los
utecinos pongámonos la mano en el corazón y defendamos la integridad de nuestra
segunda casa, institución que nos acoge día tras día para formarnos como
profesionales pero, esencialmente, como humanistas. La defenderemos con
esfuerzo y dedicación, reflejándolo en las notas obtenidas en las aulas de
clase.
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