Por: Jonathan Ipial
Con el invasivo tinte rojo, característico de
la Federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador (FEUE), la Av. 10 de
Agosto se tiñó de la rebeldía de las juventud universitaria, en una marcha
pacífica que tuvo por objetivo llegar al Palacio de Carondelet, para la entrega
de una propuesta de veto parcial a la reforma de la Ley Orgánica de Educación Superior
(LOES).
Consignas emotivas de las universidades se
hicieron presentes en esta marcha, fueron exclamadas por los estudiantes en las
calles de Quito, lo cual detonó la curiosidad en los transeúntes, que
expectantes de lo que ocurría pedían explicación a los jóvenes por la rebeldía
que demostraban.
Estudiantes afónicos, acalorados por el
compañerismo y unidad existente en la comunidad universitaria del Ecuador,
fueron refrescados por una leve lluvia que por momentos hizo intentos vanos de
disipar y apagar la euforia juvenil.
Estudiantes que llegaron de diferentes
universidades del país expresaron su emoción de participar en esta acción
colectiva, que el movimiento estudiantil generó en el marco del 47 Congreso
Nacional de la FEUE.
Xavier Gaibor, estudiante de la Universidad
Estatal de Milagro, comenta que realizaron más de ocho horas de viaje para
llegar al encuentro nacional de la FEUE. Ahora ven que su participación es
importante para la universidad, ya que la lucha en conjunto permitirá generar
acciones de cambios en la estructura de la educación superior del país.
La emoción de los estudiantes era evidente, cada
una de las universidades quería hacerse notar en las principales calles de la
capital. Como fue el caso de María José, estudiante de la universidad Luis
Vargas Torres, dijo sentirse motivada por el respaldo existente de las otras
universidades del país, y que las dificultades para llegar a este congreso no
fueron un impedimento para hacer notar la presencia de su querida universidad.
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